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Primeros acercamientos al manual APA

  • Foto del escritor: Lorena Sánchez
    Lorena Sánchez
  • 20 ago 2018
  • 6 Min. de lectura

Actualizado: 21 ago 2018

Semana 5: 13 al 17 de agosto de 2018.

En primer lugar quiero empezar contándoles y compartíendoles mi experiencia de por qué falté a la clase del lunes 13 de agosto. La razón: estaba en la audiencia pública en la que se escogerían a los 10 candidatos para contralor.



Todo comenzó así...El reto de la semana para mi clase de noticia era asistir a una rueda de prensa o audiencia pública. Después de realizar diferentes llamadas y no obtener ningún resultado, decidí acudir a Twitter en busca de algo útil. Allí fue donde encontré el comunicado de la Contraloría para la audiencia que se llevaría a cabo ese mismo día. Mandé un correo electrónico informando de mi intención de asistir y me respondieron con un “listo”.

Por lo tanto, ese lunes a mediodía me dirigí al Capitolio Nacional en busca de mi noticia, entré con algunas dificultades y escuché lo que decían los 59 aspirantes seleccionados por la UIS (Universidad Industrial de Santander). Su propósito era convencer con sus intervenciones y hojas de vida, a los miembros de la Comisión Accidental, quienes escogerían a los 10 candidatos que pasarían a la siguiente ronda.

Ahora bien, ustedes se preguntarán ¿y esto cómo se relaciona con la escritura y el tema que nos concierne? Pues bien, la verdad están muy vinculados, porque hablar y escribir son actividades sociales que requieren de un buen proceso de comunicación. En sus discursos, los candidatos intentaron informar y dar a conocer sus opiniones y propuestas de manera clara y precisa, manteniendo una estructura argumentativa. Esto les permitió llamar la atención de los evaluadores y de las personas que estaban siguiendo la transmisión, quienes igualmente lograron comprender, interpretar y evaluar críticamente lo dicho por los aspirante

Pero uno de los puntos clave para la comprensión de los discursos, fue el uso de un lenguaje común, el cual permitió que todos pudieran tener una idea general de lo que se estaba diciendo.

Esto mismo es lo que sucede en la escritura, en este caso, la académica. Requiere de precisión, de una estructura, un proceso y un lenguaje común, el cual permita que los lectores entiendan y evalúen los contenidos del autor.

Y ese lenguaje común es APA, erróneamente conocido como normas APA. Si, leyeron bien, por eso, si las aborrecen tanto como yo lo hacía o les causan frustración e incluso temor, quédense, porque esta bitácora esta hecha especialmente para ustedes. Recuerden, lean, infórmense y pónganlo en práctica.


Les quiero presentar la nueva sección de nuestro blog, en donde conocerán las generalidades del manual de estilo APA y aprenderán a usar ese lenguaje común que permitirá que sus publicaciones sean comprendidas por la comunidad.

Bienvenidos a los primeros acercamientos del manual APA.

Lo primero que aprenderán es: APA no es un conjunto de normas, es más bien un grupo de recomendaciones, a modo de manual, creado aproximadamente en 1929 por la Asociación Americana de Psicología. Fue creado con el fin de facilitar la comprensión de las publicaciones de ciencias sociales y de mejorar la claridad al momento de comunicar y expresar las ideas.

Ahora bien, imagínense que van a emprender una nueva aventura. Hacer un texto es como iniciar un nuevo viaje a un destino desconocido. Ustedes pueden escoger entre el camino lento pero seguro, es decir, planearlo con anterioridad, mantener una estructura, citar y referenciar fuentes. O de repente pueden elegir un poco de adrenalina e ir por el camino rápido e inestable, sin una estructura planeada, escribiendo en el momento, esperando que las ideas surjan e incluso tomando las ideas de otros como propias (corriendo el riesgo de ser acusados por plagio).

Lo más recomendable es seleccionar el camino lento pero seguro y para eso deben tener presente la siguiente guía.


“Las primeras impresiones son impresiones fuertes; por ello, el título debería ser bien estudiado y dar, en la medida en que lo permitan sus límites, una indicación clara y concisa de lo que vendrá luego-Clifford Allbutt.

Como toda buena travesía, es necesario iniciar con el pie derecho, en este caso, con un título corto (no más de 12 palabras) y llamativo, el cual sintetice el tema principal del escrito y se explique por sí mismo. Y como el título es lo primero que se ve y es lo que sintetiza el viaje, debe ir centrado, en negrita, con la primera letra en mayúscula.

Sin embargo, no deben olvidar que si su viaje se divide en etapas o secciones, es decir, en subtítulos, es necesario tener en cuenta el estilo para cada uno dependiendo del nivel y la función:


Nivel 2: Mayúsculas al inicio de cada palabra, alineado a la izquierda y en negrita.

Nivel 3: Mayúscula inicial, con negrita, sangría de 5 espacios, y punto final.

Nivel 4:Mayúscula inicial, negrita, cursiva, sangría de 5 espacios y punto final.

Nivel 5: Mayúscula inicial, sin negrita, con cursiva, sangría de 5 espacios y punto final.


Otra cosa que se debe tener en cuenta, es quién está emprendiendo el viaje. En este caso ustedes son los autores de la travesía, por lo tanto deben ser reconocidos como tal. La estructura para dar créditos al creador es: nombre de pila, apellidos y afiliación, es decir institución a la que pertenece. No usar cargos ni estudios.

Por otra parte, una de las cosas más importantes es el resumen, esto define el escrito, es como si le contaran su viaje a alguien y dependiendo de lo que ustedes sinteticen, la persona decidirá si quiere emprender o no la travesía. Lo mismo sucede con el escrito, dependiendo del resumen, el lector decidirá si quiere continuar o no con la lectura. Por esta misma razón debe responder a la pregunta: ¿en qué consiste el trabajo?, de manera precisa, concisa, coherente y legible. Eviten el uso excesivo del estilo literario, recuerden lo dicho por el biógrafo Ronald McKerrow:

“Expongan sus hechos tan sencillamente como puedan, incluso audazmente. Nadie espera flores de elocuencia ni ornamentos literarios en un artículo de investigación”.

Posteriormente procedan con la introducción. Esta es el inicio de la aventura, es la primera parte, en la cual se conocerá el anteproyecto, es decir, los problemas a resolver durante el viaje, la hipótesis que dará lugar a preguntas y nuevas aventuras (investigaciones), el estado del arte (contextualización, clasificación, categorización y análisis), la justificación y los objetivos del viaje: qué se hizo y para qué.

Por otro lado, el durante el viaje es explicado por medio del método, en el cual se da a conocer quiénes participan de la aventura, los procedimientos, estrategias y planes para llegar a la meta. En esta parte se describe el cómo se realizó, dando lugar a conceptos y variables. De esta manera, es posible evaluar si la metodología usada fue la correcta. Igualmente, esta se debe dividir en subsecciones (es la primera parte que utiliza subtítulos) o etapas de la siguiente manera: la primera describe los participantes y el procedimiento de muestreo, mientras que la segunda incluye la descripción de las manipulaciones experimentales y el diseño de la investigación.

Dirigiéndonos al final de la travesía, una de las partes más decisivas que demuestra si el viaje fue un éxito o un fracaso, son los resultados, en los que se resumen las experiencias y los datos encontrados por medio de gráficas y estadísticas y se realiza un posterior análisis que permitirá llegar a unas conclusiones.

Después, se escriben los comentarios, este es el final del viaje, son las conclusiones, evaluaciones e interpretaciones de la travesía, en donde se retoma la hipótesis (la cual puede ser refutada o afirmada) evitando siempre repetir lo ya dicho. Igualmente se presentan nuevos descubrimientos y se dejan preguntas abiertas para que alguien más inicie una nueva aventura.

Ya en las referencias, es necesario reconocer el trabajo de los demás, es el camino largo del que les hablé en principio: citar a los autores de otros viajes que sirvieron para hacer el nuestro más fuerte, profundo, válido y preciso. Sin embargo, eviten exagerar con las fuentes, recuerden que “los textos que contienen innumerables referencias revelan más inseguridad que erudición”- William Roberts. Nota: Tengan en cuenta que estas se deben iniciar en una página nueva y se deben ubicar por orden alfabético con sangría francesa.

http://normasapaide09104002.blogspot.com/2016/05/referencias-segun-normas-apa.html

Por último, solo queda decir que un trabajo de investigación sólo está realmente terminado en el momento de su publicación. No olviden: un proyecto es un proceso que reúne experiencia, lectura, observación y reflexión y permite descubrir algo nuevo. Un artículo científico no debe dar un resultado cerrado, por el contrario debe dejar la puerta abierta a nuevas investigaciones y aventuras que alguien más desee emprender ya sea para averiguar algo nuevo o para refutar nuestra tesis. Finalmente, recuerden: APA es el manual de estilo, por eso hace más fácil la comprensión de textos, por eso apréndanlo y pónganlo en práctica, esto evitará retrasos al momento de publicar su investigación.


Y los tips de la semana son:

  • Sean concisos y precisos al escribir sus artículos, recuerden que aquí la economía de las palabras importa.

  • Los textos en APA se escriben en letra Times New Roman tamaño 12 y en cada párrafo se hace uso de sangría francesa.

  • Usen gráficas y cuadros para agrupar los datos, de esta manera será más fácil realizar la interpretación.

  • En APA las referencias siempre van en orden alfabético.

  • Pueden usar notas al pie de página para realizar aclaraciones o definir conceptos.

Referencias:

  • Day, R. A. 1996. Cómo escribir y publicar trabajos científicos. Washington, DC: Organización Panamericana de la Salud.




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